El próximo 8 de septiembre se celebra el Día Internacional de la Alfabetización. Este día fue establecido en el año 1965 por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) con el objetivo de difundir y resaltar la importancia de la alfabetización en la sociedad y en el individuo.
Desde entonces, el concepto de alfabetización ha ido evolucionando a lo largo del tiempo y, hoy en día, dicho concepto es considerado como una habilidad para aprender. En este sentido, el concepto de Alfabetización en Salud y más concretamente, la Alfabetización Digital Sanitaria se ha definido como “el grado en que las personas pueden obtener, procesar, comprender y comunicarse acerca de la información relacionada con la salud, necesaria para tomar decisiones informadas sobre salud”. Tener habilidades adecuadas de Alfabetización es necesario para la búsqueda exitosa de información de salud.
En este sentido, existen diversas iniciativas en la literatura científica destinadas a crear un “ecosistema de salud adecuado” que ofrece a la población herramientas para saber encontrar, comprender y evaluar adecuadamente la información que se encuentra en internet. Estas herramientas (cursos MOOCs, formación…etc.) tienen el objetivo común de aumentar el acceso y la transparencia a la información fiable que se encuentra en internet, ya que las personas “Alfabetizadas Digitalmente” están más preparadas para desempeñar un papel más activo en la auto-gestión y manejo de sus condiciones de salud, mejorando la comunicación con su profesional sanitario.
Asimismo, algunas instituciones como el Servicio de Evaluación del Servicio Canario de la Salud (SESCS) junto a la Fundación Canaria Instituto de Investigación Sanitaria de Canarias (FIISC) y la Universidad de La Laguna (ULL) han impulsado algunas iniciativas para abordar el concepto de Alfabetización Digital Sanitaria en Salud a partir de un Proyecto Europeo IC-Health (https://ichealth.eu/) cuyo objetivo es mejorar la habilidades de la población para encontrar, comprender y evaluar adecuadamente la información disponible en internet a través del diseño de cursos masivos online y abiertos MOOCs, (acrónimo en inglés de Massive Online Open Courses) dirigidos especialmente a niños, adolescentes, mujeres embarazadas y lactantes, personas mayores de 65 años y personas afectadas por diabetes tipo 1 y 2.
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