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Tengo un dolor punzante en la ingle, ¿puede ser artrosis de cadera?

La artrosis de cadera es un problema de salud osteomuscular crónico que afecta a las articulaciones y provoca dolor articular, rigidez y disminución de la movilidad de la cadera de forma lenta y progresiva. A pesar de que sus causas específicas se desconocen, la artrosis de cadera suele ser consecuencia de un conjunto de factores genéticos y ambientales. En este sentido, parece existir una vinculación genética entre ciertos genes y la artrosis, pero también otros factores como la edad, ya que la capacidad del cartílago para repararse disminuye con la edad; el sobrepeso, porque cuando las articulaciones soportan más peso el dolor es mayor; y la excesiva repetición de ciertas actividades (laborales o deportivas) que se suelen asociar con la artrosis.

La artrosis de cadera puede ser primaria (i.e., desarrollo de la artrosis sobre una cadera sana) o secundaria. En este último caso, toman especial importancia las patologías ya existentes, como la enfermedad de Perthes en la infancia o las artropatías inflamatorias como el lupus o la artritis reumatoide, entre otras.

La artrosis de cadera presenta una prevalencia inferior al 6% y es más frecuente en personas mayores, aunque también puede aparecer antes de los 50 años. En este sentido, el diagnóstico de esta enfermedad crónica se suele asociar a la exploración de los síntomas que la persona relata, junto a la exploración de su cadera, llevada a cabo mediante una exploración con radiografía o imágenes de resonancia magnética. Estas pruebas diagnósticas permiten que el profesional valore el nivel de desgaste articular y pueda establecer un pronóstico según el estado de deterioro de la cadera.

En la mayoría de los casos, el diagnóstico de la artrosis de la cadera parece ser simple, pero para algunas personas este proceso sintomático puede ser difícil de especificar, ya que normalmente el dolor aparece en diferentes lugares, como en el muslo, la ingle, la rodilla o las nalgas. La intensidad del dolor puede ser punzante y agudo o puede ser un dolor sordo que conlleva una cadera rígida, lo cual provoca que la mayoría de las personas tengan problemas para caminar.

Los tratamientos disponibles para la artrosis de cadera pueden ser más o menos conservadores y pueden implicar desde recomendaciones para el reposo, fisioterapia, fármacos, infiltraciones en la cadera, hasta cirugías. La utilización de uno o varios de los tratamientos, dependerá del momento del diagnóstico y del “desgaste” en sí mismo que tenga la articulación.

En este sentido, ¿cómo afrontar un diagnóstico y tratamiento para la artrosis de cadera en colaboración con nuestros profesionales sanitarios y personas de apoyo? A continuación, presentamos algunas pautas que pueden ayudarte en este proceso:

  1. Si lo prefieres, acude a la consulta con tu profesional sanitario en compañía de alguna persona de confianza (familia, pareja, amistades…).
  2. Comparte con tus profesionales sanitarios en qué lugares específicos de tu cuerpo sientes el dolor o la rigidez.
  3. Intenta expresar cómo el dolor en la articulación de la cadera ha afectado en tu día a día (i.e., trabajo, actividades diarias, autocuidado, etc.). Esto te permitirá precisar con más detalle cuánto de rígida o flexible está tu cadera.
  4. Conoce cuáles son y en qué consisten las diferentes pruebas diagnósticas disponibles. El diagnóstico conlleva, en la mayoría de las ocasiones, una prueba de radiografía o una resonancia magnética.
  5. Pregunta el grado de deterioro que puede tener tu articulación, e infórmate de los tratamientos existentes disponibles y los profesionales a los que puedes acudir para aliviar el dolor (i.e, médico rehabilitador, fisioterapeuta, etc.).
  6. Consulta páginas webs o materiales informativos para poder llevar a cabo unas buenas pautas de autocuidado y pregunta cómo puedes acceder a ellas.
  7. Infórmate sobre cómo puedes cuidarte desde casa, qué ejercicios llevar a cabo para mejorar tu condición de salud.

Si quieres saber más sobre la artrosis de cadera y cómo se diagnostica, consulta los siguientes recursos: