
Escrito por Francesca Favaro, PhD
¿Sabes qué hacer tras un ACV? Guía básica para la recuperación
El accidente cerebrovascular (ACV) es un evento inesperado que puede cambiar la vida de una persona y de quienes la rodean (leer más sobre cómo reconocer a tiempo un ACV aquí). Sin embargo, con el tratamiento adecuado y un enfoque integral en la recuperación, es posible mejorar la calidad de vida del paciente y prevenir nuevas complicaciones. Esta guía se centra en los primeros pasos que se deben seguir tras un ACV, con recomendaciones claras y fáciles para aplicar en los días y semanas posteriores.
Lo primero que se debe hacer después un ACV
Después de un ACV, lo esencial es asegurar una atención médica inmediata. La rapidez con la que se actúa puede marcar una gran diferencia en la gravedad de las secuelas. Es fundamental que el paciente reciba tratamiento médico lo antes posible para minimizar el daño cerebral. Esto puede incluir la administración de medicamentos para disolver coágulos o realizar procedimientos quirúrgicos para aliviar la presión sobre el cerebro.
Fase temprana de la rehabilitación
En las primeras etapas de la recuperación, la rehabilitación física juega un papel importante. Los ejercicios de movilidad y la fisioterapia básica, como mover las extremidades, pueden ser el primer paso para recuperar la fuerza y la coordinación. Sin embargo, no solo es importante la rehabilitación física, sino también el apoyo emocional. Es común que los pacientes experimenten síntomas de ansiedad o tristeza después de un ACV, por lo que el cuidado emocional en esta etapa es fundamental para una recuperación integral.
Papel del cuidador es en los primeros meses
El rol del cuidador en los primeros meses de recuperación es crucial. En este periodo, las familias deben ayudar con la movilidad, crear un entorno seguro en casa y ofrecer apoyo emocional constante. Asegúrate de que el paciente pueda moverse sin riesgos, como caídas o accidentes, y que el hogar sea cómodo y accesible.
Prevención a corto plazo
Aunque la intervención médica es clave, en los primeros días después de un ACV también es importante poner en práctica hábitos de autocuidado que reduzcan el riesgo de complicaciones inmediatas. Controlar la presión arterial, los niveles de azúcar en sangre y el colesterol ayudará a prevenir problemas adicionales y promoverá una recuperación más efectiva.
Conclusión
La recuperación tras un ACV es un proceso que comienza con atención inmediata y un enfoque integral desde el inicio. A través de la rehabilitación física, el apoyo emocional y la creación de un ambiente seguro en casa, el paciente puede comenzar su camino hacia la recuperación. En la siguiente parte de esta guía, exploraremos cómo continuar con una rehabilitación más avanzada y cómo los cuidadores pueden seguir brindando el mejor apoyo.
Recuerda que esta información está basada en las pautas establecidas en la Guía para el Manejo del Ictus para Pacientes, un recurso útil que proporciona recomendaciones clave sobre cómo enfrentar el proceso de recuperación de un accidente cerebrovascular.