El haber realizado el test de sangre oculta con resultados negativos significa que no se ha detectado sangre en las heces (por tanto no hay indicios de cáncer colorrectal) lo cual genera alivio y tranquilidad. La recomendación del programa de prevención es repetir la prueba al cabo de dos (2) años.
RECIBIENDO LOS RESULTADOS
Agustina se despreocupó y olvidó del tema mientras esperaba los resultados:
“P.: Porque antes, por ejemplo tú de tu prueba ¿te preocupaste en algún momento? R.: Nada. Es que ni me acordaba, yo la primera vez, vamos, cuando mandaron la carta es que ni me acordaba que me lo había hecho, fíjate qué preocupación tenía, pero para nada. P.: Te olvidaste totalmente. R.: Total, total. Es que despreocupada total. Digo: “fíjate, no acordarme para nada”. Sin embargo, digo: “está bien, me la van a hacer”. Cuando ya me hicieron digo: “pero si dio negativo pero bueno, bueno, que me lo hago, que no pasa nada”, digo que encantada. P.: ¿No te pareció como reiterativo y…? R.: No, me pareció muy seguido. Para haber dado negativo me pareció muy seguido a los dos años volvérmelo a hacer otra vez. Pero ya me había dicho “no, si dentro de dos años os lo van a hacer otra vez”. O sea que ya me había avisado, ¿sabes? Ya lo sabía, “que os lo van a hacer otra vez”. Digo: “bueno, pues tampoco pasa nada”, ¿sabes? Si fuese otra cosa, pero eso, vamos, tampoco… P.: Claro, como te pareció sencillo tampoco… R.: Sí, exactamente.”
Francisco dice que su actitud es no preocuparse anticipadamente, sino esperar con calma:
“P: Entre que usted deja las pruebas y le mandan los resultados, que se los mandaron por carta. R.: Sí. P.: ¿Pasa nervios o se…? R.: No, la verdad es que no. Hombre, la verdad es que uno se hace la prueba realmente pensando en que no tiene nada. Lógicamente pues oye, hasta que no te digan que realmente hay un problema, ¿por qué preocuparse? O sea que más vale preocuparse a partir de que uno sepa algo, pero si es preocuparse por nada, porque sí. Puede pasar de que uno no siente nada, no tiene ningún indicio de nada, pues no hay razón para pensar que puedas tenerlo, pero oye, nadie sabe. Pero realmente preocuparme no porque de momento no hay nada. Cuando ya me digan, ya veremos lo que ocurre.”
Cuando pasaron unos pocos días y no recibían noticias del centro de salud, Ángel y su esposa pensaron que no debían preocuparse. Recibieron finalmente una carta a los 15 días confirmando que el resultado de las pruebas de cada uno eran negativos:
“el resultado del test se lo dijo cuando vino a la visita de la enfermera que tenía programada para lo del control de sangre, ¿o no? O le llamó, el test que hicieron de sangre oculta, en heces. R.: No, no, recibí una carta. Recibimos carta en casa. P.: ¿Sobre el resultado? R.: Sí, sobre el resultado. Sobre el resultado recibimos carta en casa. P.: Lo mandaron en carta. Vale. R.: Sí, sí. Nos lo mandaron en carta a los dos, tanto a mi mujer como a mí. P.: ¿Cuánto tardaron más o menos en…? R.: Poco, poco. 15, 20 días como mucho. P.: ¿Desde la prueba? R.: Desde la prueba hasta eso, pues, aproximadamente unos 15 días. P.: ¿Se acuerda lo que ponía en la carta? R.: Que los resultados del test, que habían salido negativos. P.: Y cuando la recibieron, o sea, usted fue al buzón y vio, wow, carta. R.: Sí. P.: ¿Qué pensó? R.: Pues, a ver. La abrimos… P.: ¿Lo vinculó con el test? R.: Sí, lo vinculamos con el test, y la abrimos, pues, y nuestra alegría fue pues que había salido todo negativo, que había salido todo perfectamente y que no había… P.: ¿A los dos? R.: A los dos. Y que a la vuelta de aproximadamente un par de años, me parece que ponía algo así, como que en un par de año volverían a mandarnos otra vez a ver si estábamos dispuestos a hacer otra vez la prueba.”
José Francisco se muestra muy conforme y agradecido por el llamado que recibió desde su centro de salud la segunda vez que se realizó el TSOH:
“P: En cuanto a… cuando a usted le llamaron para… desde el centro de salud para el tema de la prevención la primera que vez les dio negativo, ¿les sorprendió que les llamaran para esto o ya sabían? – José Francisco: No, me sorprendió pero me sorprendió agradablemente porque oye, una cosa que estás bien, uno había oído decir que si no me llaman ellos, y esto que tengo yo pues lo mismo podría haber muerto o cogérmelo tarde. Porque tú sabes que ya cuando esto duele ya tienes hasta metástasis. Pero mira, me pareció estupendamente bien que me llamaran, lo vi bien y fui y me lo hice. Además lo vi estupendamente bien. – Carmen: No, yo lo veo bien que… el caso de una cosa que se puede prever que…hagan campañas de esas cosas… – José Francisco: Debería ser igual con todos los tipos de enfermedades de éstas.”
Mientras esperaba el resultado Josefa pensaba que el hecho de no recibir un llamado telefónico del centro de salud significaba que todo había ido bien:
“Si te mandan una carta pronto malo R.: Vamos a ver, yo pienso, si te mandan una carta pronto, te hacen una mamografía y tú ves la carta en el buzón a los tres o cuatro días, o te llaman por teléfono dices: “Malo” Pero ya, cuando pasa, no sé, por ejemplo una semana, yo ya respiro. Digo: “Bueno, ha pasado una semana, eso quiere decir…” P.: O sea, que la primera semana está como con la cosa pendiente y luego ya… R.: Sí, sí, sí tanto con la mamografía como lo del colon, me pasa eso, me pasó. Digo: ”Ha pasado una semana, la cosa va bien”.”