La comunicación con los profesionales sanitarios es un aspecto muy importante. La forma, el contenido y el estilo de comunicación, así como el tipo de relación entre profesionales y personas con diabetes es variado.
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COMUNICACIÓN
La comunicación con los profesionales sanitarios es un aspecto muy importante. La forma, el contenido y el estilo de comunicación, así como el tipo de relación entre profesionales y personas con diabetes es variado. Debido a que se trata de una condición de salud crónica que puede afectar a diferentes órganos, las personas con diabetes interaccionan con varios tipos de profesionales sanitarios (dietética/nutrición, podología, oftalmología, nefrología, neurología, cardiología, educación, enfermería y medicina de atención primaria). En la mayoría de los casos, los participantes se relacionan con más frecuencia con el personal de atención primaria. Se valora no solo la información y los cuidados que se ofrecen sino también el trato recibido. Con frecuencia se establecen relaciones de confianza con el personal de enfermería o las educadoras en diabetes porque las consideran más asequibles y disponen de más tiempo que el médico.(Más información: Atención por profesionales sanitarios.)
Juan explica que no todos los médicos son iguales y que hay algunos que le han tratado mejor que otros.
“Eso a mí, me han tratado estupendamente, a mí el médico de cabecera, la verdad que como lleva conociendo a mi madre mucho tiempo tengo buena amistad y yo la verdad puedo contar que se ha portado conmigo estupendamente, lo mismo con mi madre que tiene la enfermedad. Conmigo, ellos dos pues te puedo decir lo que nos han tratado de diabetes, que se han pasado y luego después la endocrina cuando me toco aquella, porque cambian y no es la misma, a lo mejor está ahora una doctora y dentro de a lo mejor dos años ya hay otra. Te digo la que me trató a mí en aquel entonces estupendamente, la que me trató, mi madre a lo mejor ha conocido más endocrinas, o más endocrinos, varios porque lleva muchos años, yo te digo que aquella chica, que era una chica joven, que me acuerdo yo de ella, pues en aquel tiempo me trató a mí muy bien.”
Juan está encantado con su relación con la enfermera y el médico de cabecera.
“Otras cosas que no tienen que ver con lo de la diabetes…no estoy tan conforme…pero con la cosa de la diabetes estoy encantado con los servicios de la seguridad social, lo mismo la enfermera del medico de cabecera antes cuando no me mandaba con los endocrinos, con la enfermera estaba con el medico de cabecera, la enfermera me llagaba y me decía ‘a ver…dentro de 4 ó 5 días ya te apunto aquí vienes a la mañana, vienes en ayunas que te voy a hacer la glucosa” te voy a hacer esto o lo otro y luego ya cuando pasé al endocrino pues igual, con las enfermeras ya llegas allí el día con hora. Hay consulta también con las enfermeras si quieres ir fuera aparte del médico.”
En otros casos las experiencias con los profesionales sanitarios no han sido tan positivas.
Para María la comunicación con algunos profesionales sanitarios es insuficiente.
“No, no explican nada, y aquí tampoco, estoy yendo todos las semanas, todas las semanas no, todos los meses, ya te enseñaré el papelito que tengo, me pinchan que yo también tengo para pincharme y me vigilo cuando quiero. Pues ya está, y me lo ponen allí y voy y dice “¿qué le hace falta, que se le acabó el Dianben” o el otro o que me recetan y nada más.”
José considera que es muy importante encontrar un profesional receptivo con quien poder comentar diferentes aspectos relacionados con la diabetes.
“Yo creo que es lo que vale, y efectivamente al final quizás no demos el valor, si se lo damos ¿no?, pero no el valor tan importante que tiene un médico a la hora de un diagnóstico de estos y a la hora de asesorarte ¿no?, y de corregir un poco todos estos temas, yo creo que eso es. Por lo tanto yo digo yo me encuentro muy a gusto cuando voy junto a este, yo como saliendo un poco de lo que es la diabetes, con el tema este de mi problema de la pierna y he empezado a hacerme muchas pruebas porque no me daban, no me dan todavía, entonces bueno, por eso no cierro eso, y bueno pues yo iba todas las pruebas y se las llevaba a él para que él me las viese y bueno, pues vuelvo a repetir, de alguna manera el encontrarte con un profesional receptivo, una persona que te dice “oye tú tráeme todas las pruebas porque así lo metemos todo aquí en el ordenador, lo metemos todo en tu historial, para tenerlo controlado, para en cualquier momento saber lo que hay” etc, etc. y ves que le llevas las pruebas, las ve, las analiza, te comenta cosas, no sé cuantos, ah pues no te preocupes por aquí, es decir, bien, o sea yo creo que es algo que uno espera ¿no?, que uno espera y que a veces no encuentra, pero bueno, en este caso efectivamente sí, en este caso sí, yo lo he encontrado gratamente.”
Muchas personas habían aprendido con el transcurso del tiempo a ir “negociando” con los profesionales los tratamientos sugeridos para ir ajustándolos a las reacciones particulares de su cuerpo. Algunos sentían que los médicos y enfermeras los animaban a tomar decisiones de manera compartida y a aumentar su autonomía. Consideran que es importante un clima de respeto y confianza y que exista un tiempo para hablar de las preocupaciones sobre los cuidados de la diabetes. Algunos consideran que el cuidado no solo depende de los profesionales sanitarios sino de uno mismo.
Eligi valora muy bien la relación de confianza establecida con su médico y la posibilidad de participar en la toma de decisiones sobre su tratamiento.
“Decidimos conjuntamente, sobre todo ella me aconsejó que a partir de ese momento empezáramos a tomar medidas un poco más drásticas, no por la dieta o por el ejercicio que yo pudiera hacer, que eso me ayudaría, sino sencillamente porque si yo hacía el ejercicio y hacía un poco de dieta, vamos a ayudarlo con las pastillas que hasta este momento no me estaba tomando, y a partir de ahí empecé a tomarlo. A ver, yo tengo mucha confianza en la doctora, es una persona para mi muy agradable. No sé, y me llamó ella personalmente, quiero decir que con las personas que yo tengo confianza y me ofrecen la posibilidad de explicar la enfermedad, no puedo decir que no, no es que me guste tampoco, no soy una persona que esté acostumbrada a hablar delante de las cámaras, he hablado en público pero no es lo mismo, pero no, no hay ningún interés.”
Maria Rosa valora su experiencia con un médico que le promovía su autonomía en el cuidado de su salud.
“Yo me recuerdo un médico hace años que él me dijo a mi, porque hablando así de la enfermedad, entonces dice “mira, te voy a decir una cosa, no hay mejor médico, no nosotros, sino uno mismo, porque tu sabes si te hace daño o si no te está, yo te mando las cosas, pero tu no sabes, yo no se si te está haciendo daño, tu eres la que tienes que mirarte, así que la mejor doctora eres tú” claro ellos, la vida te va enseñando, y según te va enseñando pues eso vas haciendo.”
Varias personas que tenían diabetes desde hacía muchos años decían que la comunicación y la relación con el personal sanitario habían mejorado en los últimos tiempos. Apreciaban los consejos médicos para adecuar las prescripciones a sus necesidades específicas.
Pedro explica cómo la sanidad y los profesionales sanitarios han mejorado con el paso del tiempo.
“Que por cierto es fabuloso el hospital, yo no sé pero la sanidad para mí ha cambiado a horrores, porque desde que estoy en este hospital una cantidad de atenciones, lo mismo los médicos, que lo mismo los ATS, que los mismos el personal de servicios, todo el mundo, una verdadera alegría, atentísimos desde luego todo el mundo, hombre y así pues da gusto, tienes otra confianza, otra cosa.”
Algunas personas, en cambio, decían que habían tenido períodos de falta de control de sus profesionales sintiendo una cierta rutina o automatismo y descuido en el seguimiento de su diabetes.
Normalmente hay una rutina de cuidados establecida y Antonio considera que debería haber más explicaciones y relación en el tiempo.
“La falta de información sobre todo está en la Seguridad Social, porque considerarán, digo yo, considerarán que cuando ellos te mandan las pastillas, y te hacen un control analítico y ven que vas bien o no vas bien, pues se limitan a decir, bueno pues con lo que me han dado van bien, pues ya está, para que me voy a entretener a explicarle esto y lo otro, y… nada más, y sin embargo aquí en la asociación, pues ya digo, nos dan unas charlas de vez en cuando que son muy útiles.”
Otra cuestión es la necesidad de comunicación y coordinación entre profesionales sanitarios de diferentes disciplinas, aunque no siempre se realiza adecuadamente.
Antonio considera que el tratamiento de las enfermedades está fragmentado.
“El neurólogo, la había visto el neurólogo, y le había dicho “noto que tiene usted la cifra de tiroides muy alterada” entonces fuimos al departamento de endocrinología de aquí, y allí una chica, nos explicó muy bien, ya noto yo que se va la gente espabilando que se llama aquí, contando más cosas y explicando más claro, porque ya está más compartimentado el asunto de los tratamientos, es decir, cardiología, endocrinología, no sé que, esto, lo otro, y eso permite que la gente se fije más en cada una de esas materias…debo decirlo también eso.”
Un tema destacado es el tipo de información que se recibe por parte de la comunicación con los profesionales sanitarios. Varias personas manifestaron disconformidad con la manera y el momento en que se impartía la información. Principalmente se distinguen dos formas: una forma considerada como agresiva y que algunos participantes valoraban como negativa, y otra forma considerada “suave” que para otros participantes no era la adecuada. Para algunos la forma en la que se comunican los profesionales sobre la diabetes es muy “blanda”, y consideran que deberían explicar la gravedad de la condición de salud de manera más agresiva para que las personas sean más conscientes en los cuidados que deben realizar.
Así explica Julio su opinión.
“Sí, tuvieron que hacerlo rápido ahí y todo. Porque estaban los riñones parados y había que empezar a darme diálisis y… ¿Y esto fue más o menos hace 5 años, usted me decía? Sí, sí estuve como 29 meses dándome diálisis y 6 meses estaría tal. 3 años y medio o 4 hará de eso. Eso hace aproximadamente 2 años. Y en, estaba casi bueno, me pusieron en lista de espera, y en la lista de espera se hizo sino 6 días ó 7, en ese momento me vino el riñón. Claro, como lo tenía seco y tal, me pusieron el riñón. Tengo la suerte de que quedó perfecto.”
Otros, como por ejemplo Mari Carmen y Francisco, en cambio consideraban que su médico les habían advertido bruscamente de los “peligros de la diabetes”, y no lo consideran apropiado.
“¿La neuropatía qué ha significado para usted? Una disminución de mis posibilidades físicas. Yo la tengo bastante estabilizada, ahora mismo pues claro, cansancio normal, me resiento, pero es que hay momentos en que te dan esos latigazos y en el dedo gordo del pie me da un dolor increíble, dura muy poquito, pero si eso fuera continuo, sería horroroso. Además, se cambia de una forma muy aleatoria, puede ser la pierna, puede ser la rodilla, puede ser cualquier cosa. Es una afectación de los nervios, entonces donde se acusa, pues allí está, ahora la tengo estabilizada, es decir, que normalmente estoy bastante bien, pero que no deja de vez en cuando de darme esos latigazos que ya digo, duran poco porque si no serían horrorosos. ¿Hace algún tratamiento al respecto para eso? Si, para la neuropatía estoy tomando una pastilla”
Otros, como por ejemplo Mari Carmen y Francisco, en cambio consideraban que su médico les habían advertido bruscamente de los “peligros de la diabetes”, y no lo consideran apropiado.
“Hombre yo la primera vez me lo pusieron, porque me mandó al endocrino y vamos, a mí me lo puso como que me iba a morir, que iba a ser diabético para toda la vida, tú tienes que estar enganchado a la insulina, a mí me lo pusieron muy negro, y fui a pedir un segundo diagnóstico, me dijeron no te preocupes, lo tuyo es más de la gordura que de otra cosa, yo en esa época pesaba 160 kg, tenía un sobrepeso, bastante elevado y pues tú pierdes kilos y ya a consecuencia de los kilos, pues ya la diabetes se te va regulando más, y exactamente, me puse a plan, perdí 30 kilos.”
En todo caso parece que lo más adecuado es que la información deber reiterarse en varias ocasiones para poder ir incorporándola, comprendiéndola y sobre todo, aplicándola al propio cuidado.(Más información: Buscando información y apoyo.)