El sexo, la sexualidad y la intimidad son tan importantes para las mujeres con cáncer de mama como lo son para cualquier persona. De hecho, se ha demostrado que la sexualidad y la intimidad ayudan a afrontar la enfermedad y a sobrellevar los sentimientos de angustia [1]. No obstante, es cierto que los órganos sexuales, el deseo sexual, la función sexual, el bienestar y la imagen corporal de una persona pueden verse afectados por el cáncer y su tratamiento. Los tratamientos contra el cáncer de mama pueden producir efectos secundarios que afectan a la vida sexual de la persona que lo padece. Algunos de estos efectos pueden ser de carácter físico, como la fatiga o la sequedad vaginal que se asocia con dolor durante la penetración, y otros son de tipo psicológico, como la disminución del deseo sexual o la baja autoestima [2].
La sexualidad no puede ser la gran olvidada en la atención al cáncer. De acuerdo con las recomendaciones de La Sociedad Española de Menopausia, la Federación Española de Sociedades de Sexología, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria y la Sociedad Española de Oncología Médica, la sexualidad debe abordarse como parte integral del tratamiento para mejorar la calidad de vida de las pacientes con cáncer de mama. De ser posible, la salud sexual debe ser abordada a través de un equipo multidisciplinar que incluya profesionales de oncología, enfermería, psicología, psiquiatría y sexología [3]. En España, organizaciones como la Asociación Española Contra el Cáncer [4] está poniendo en marcha talleres on-line, dirigidos a pacientes en cualquier fase de la enfermedad, en los que se aborda la relación entre la enfermedad oncológica y la vida sexual y se ofrecen herramientas psicológicas para llegar a conocer y reconstruir una nueva sexualidad de forma plena.
Si te preocupa cómo el cáncer o su tratamiento pueden afectar a tu vida sexual, no dudes en consultar con los profesionales que te asisten y hacerles todas las preguntas que para ti sean importantes. Organizaciones internacionales como el Instituto Nacional del Cáncer estadounidense [5] y la Sociedad Americana Contra el Cáncer [6], han recopilado algunas de las preguntas sobre sexualidad y cáncer que pueden hacerse las mujeres en diferentes momentos de la enfermedad. Léelas con atención y anota aquellas que necesites compartir con tus profesionales sanitarios:
Después del diagnóstico:
- ¿Qué tipo de problemas sexuales pueden ocurrir debido al cáncer?
- ¿Es seguro tener sexo antes de la cirugía y tratamiento?
- ¿Necesito usar protección o métodos anticonceptivos antes de la cirugía y tratamiento?
Antes de de iniciar el tratamiento:
- ¿Cómo afectará el tratamiento a mi apariencia física?
- ¿Cómo afectará el tratamiento a mi vida sexual? ¿Afectará a mi deseo, respuesta o función sexual?
- ¿Cuánto tiempo podrían durar estos problemas? ¿Serán permanentes?
- ¿Qué puedo hacer si aparecen estos efectos?
- ¿Necesito usar métodos anticonceptivos mientras estoy en tratamiento? ¿Por cuánto tiempo?
- ¿Qué medidas de seguridad necesito tomar y por cuánto tiempo?
- ¿Hay algunas situaciones en las que debo evitar la actividad sexual?
- ¿Podré quedarme embarazada después del tratamiento?
Fuentes:
[1] El cáncer, el sexo y el cuerpo femenino.
[4] Taller on-line “Sexualidad y Cáncer” – Asociación Española Contra el Cáncer
[5] Pláticas con su equipo de cuidados médicos acerca de problemas de salud sexual.
[6] Preguntas que las mujeres adultas tienen sobre el cáncer y el sexo.
